1. ¿Qué es la «Mentalidad de Víctima»?

Tener una ‘mentalidad de víctima’ significa que culpas de tus desafíos de vida a los que te rodean, incluso si no puedes demostrar acciones negativas de la otra parte.

También puedes culpar a las circunstancias por muchas cosas, que siempre consideras injustas.

2. Saber Diferenciar: Ser Víctima vs Autocompasión vs Mentalidad de Víctima

2. Saber Diferenciar: Ser Víctima vs Autocompasión vs Mentalidad de Víctima

En la vida pueden suceder cosas malas. Puedes ser víctima de un delito, como fraude o incluso agresión sexual. En tal caso, tienes todo el derecho a sentir que las cosas estaban fuera de tu control, porque de hecho lo estaban, y cualquier pensamiento de: que de alguna manera es tu culpa y eres responsable es un pensamiento erróneo.

También es perfectamente normal sentir lástima por ti mismo de vez en cuando, o sentirte impotente frente a un desafío como un duelo o un divorcio.

Pero si tienes una mentalidad de víctima, verás toda tu vida desde la perspectiva de que las cosas te pasan a “ti” constantemente. La victimización es, por lo tanto, una combinación de ver la mayoría de las cosas en la vida como negativas, más allá de tu control, y como algo por lo que deberías recibir simpatía y que por algo ‘te mereces’ algo mejor. En el fondo, una mentalidad de víctima es en realidad una forma de evitar asumir cualquier responsabilidad por ti o tu vida. Al creer que no tienes poder, entonces no tienes que hacer algo para cambiar las cosas.

Una persona sana, por otro lado, reconoce que más allá de los malos eventos ocurridos al azar, suceden muchas cosas en la vida debido a las decisiones que ellos mismos tomaron, y que tienen el poder de elegir de manera diferente. Y entienden que cuando ocurre una desgracia, no tiene nada que ver con el valor personal o ‘merecer’ o ‘no merecer’.

Lee también: ¿QUÉ HACER SI TU PAREJA ESTÁ A LA DEFENSIVA TODO EL TIEMPO?

3. ¿Por qué elegiría siempre ser una víctima?

3. ¿Por qué?

Actuar constantemente como una víctima en realidad puede tener muchas ventajas. Estas pueden ser percibidas de la siguiente manera:

  • “No tengo la responsabilidad de las cosas”
  • “Tengo el «derecho» de quejarme y recibir atención”
  • “Los demás se sienten mal por mí y me prestan atención”
  • “Las personas deben ser menos propensas a criticarme o molestarme”
  • “Puedo contar historias sobre las cosas que me sucedieron y seré más interesante”
  • – No tienes tiempo para aburrirte porque hay tanto drama en tu vida
  • – Puedes evitar sentir ira alguna vez, porque estás demasiado ocupado estando triste y molesto/a.

Si nos fijamos en las oraciones anteriores, es posible que ya veas el patrón de cuáles pueden ser los verdaderos beneficios de ser una víctima. Son:

  • Atención
  • Sentirse valorado/a
  • Poder

Lee también: ¿NECESITAS UN TRATAMIENTO DE SALUD MENTAL? CÓMO SABER

4. El Poder Oculto Detrás de Ser una Víctima

4. El Poder Oculto Detrás de Ser una Víctima

¿Sorprendido/a de que jugar el papel de víctima te da poder, porque te has convencido de que tu vida es tan horrible que no tienes ningún poder? Esto es lo que la víctima se dice a sí misma.

“Pero hacer que otros sientan lástima por ti puede ser una forma fácil de manipularlos para satisfacer tus necesidades y deseos”. Esto puede ser algo pequeño, como alguien que siempre vaya a las compras por ti, o puede ser más profundo e insidioso, como por ejemplo que tu acto de «pobre de mí» obligue a otros a tratarte bien y nunca te griten, o te dejen, incluso si ellos sienten que deberían.

Un ejemplo de victimización como forma de poder es una relación codependiente, como la que existe entre un alcohólico y su pareja. El «cuidador» puede ser una víctima, soportando el comportamiento terrible del alcohólico y sacrificando sus propias necesidades para cuidar de éste, solo para algún día usar la culpa, las quejas y el «pobre de mí» para luego intentar controlar al alcohólico.

En un escenario más oscuro, el papel de la víctima también puede ser una forma común para que los abusivos tomen el poder, llamado «jugar a la víctima» en psicología. Una forma de victimización menos inconsciente, puede ser el caso de un abusivo que constantemente agrede a su pareja y luego toma la única vez que la parte abusada reacciona bruscamente y le llama monstruo, y se da cuenta de que en realidad es el «atacado». O un abusador dirá que no es su culpa que golpee a la otra persona -cuando esa persona es tan molesta y estúpida y tienen que ‘aguantarla’. De esta forma, un abusador usa la mentalidad de «pobre de mí» para defender su comportamiento sociopático.

Lee también: ¿QUÉ PROLONGA UNA MALA RELACIÓN?

5. ¿Por qué soy el tipo de persona que interpreta a la víctima?

5. ¿Por qué me victimizo?

¿Qué te hace más propenso a que seas del tipo que vive su vida desde una mentalidad de víctima?

Al igual que la mayoría de los patrones de comportamiento, la mentalidad de víctima es un comportamiento aprendido que se remonta a la infancia.

Podrías haber aprendido a hacer de víctima porque observaste a los adultos a tu alrededor haciéndolo. Por ejemplo, si tu madre o tu padre, siempre sintieron que el mundo estaba dispuesto a ayudarlos y se quejaron a diario de todas las personas o situaciones que los perjudicaron, -entonces tomarías en cuenta que esta era la manera de ganar poder y atención personal.

Es posible que tengas una relación codependiente con uno de tus padres. Te habrías sentido responsable de su bienestar, ya sea cuidando a un padre enfermo (mental o físicamente) o haciéndole creer que estás a cargo de su felicidad. El mensaje que un niño puede tomar aquí es que no solo tiene que ‘ganarse’ el amor, sino que, si está enfermo o débil, otros lo cuidarán. Ambos pueden conducir a patrones de victimización como adultos.

O bien, podrías haber aprendido a ser una víctima porque fue una forma de sobrevivir a tu infancia. Cuando fuimos niños, todos requerimos atención y amor, y si nuestros cuidadores no lo ofrecieron de manera libre, nos quedaba encontrar formas de recibirlo. Quizás, en el hogar de tu familia, la única forma de recibir atención y cuidado era estar enfermo o actuar débil o permitir que cosas malas te ocurrieran.

Muchas personas que viven la vida desde una mentalidad de víctima fueron víctimas de abuso en la infancia. Esto a menudo dentro de la categoría de abuso sexual. La impotencia que siente un niño, combinada con las profundas causas de abuso de vergüenza, puede significar que te conviertas en un adulto que no tiene autoestima y que ve el mundo como un lugar peligroso en el que está perdido.

Lee también: ¿POR QUÉ NO USO EL ‘PERDÓN’ EN TERAPIA DE TRAUMA?

6. ¿Qué debo hacer si reconozco que sufro de victimización?

6. ¿Qué debo hacer si reconozco que sufro de victimización?

Desde el lado positivo debes entender que, debido a que la mentalidad de víctima es una conducta aprendida, puedes «desaprenderla».

De todas maneras, es un proceso que lleva tiempo y puede ser bastante intenso, especialmente si está relacionado con un trauma infantil como el abuso o el abandono.

Y lidiar con la victimización significa que debes enfrentar la ira, la tristeza, la vergüenza y el temor –emociones de las cuales, al hacer el papel de víctima te proteges y escondes.

Por lo tanto, se recomienda buscar apoyo cuando estas intentando enfrentar tu mentalidad de víctima. Un psicólogo por skype experimentado puede crear un espacio seguro y sin prejuicios para que puedas explorar por qué actúas como víctima y qué eventos de la infancia te llevaron a tal comportamiento de adulto. Entonces, te ayudará a aprender nuevas formas de pensar y ver el mundo, que te resultaran más beneficiosas.

Lee también: ¿ES LA PSICOTERAPIA POR SKYPE ADECUADA PARA TI?

¿Tienes una opinión sobre la mentalidad de víctima? Compártela abajo en la sección de comentarios. También me gustaría leerte.

Referencias:

  1. How to Stop Playing the Victim Game. Robert Firestone Ph.D. (2013)
  2. Victimization, Psychological Distress and Subsequent Offending Among Youth. Hartinger-Saunders, Ritter, Wieczorek, Nochajski, Rine & Welte. (2011)
  3. Rethinking ‘Don’t Blame the Victim’: The Psychology of Victimhood. Ofer Zur, Ph.D. (2008)
  4. The Victim Personality. Nicola Davies. (2012)
  5. Relations between peer victimization subtypes, family violence, and psychological outcomes during early adolescence. Espelage D.L., Low S., & De La Rue L. (2012).
  6. Are You a Victim of the Victim Syndrome? Manfred F. R. Kets de Vries. (2012)
  7. The Psychology of Sexual Victimization: A Handbook. Michele Antoinette Paludi. (1999)

Gifs by Giphy & Main Photo by Noah Buscher on Unsplash

Un comentario sobre «Mentalidad de Víctima: ¿Qué es y por qué la usas?»

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *